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Está claro que si nuestros hijos comienzan jugando con una impresora 3D pensada para ellos, las nuevas generaciones usarán las nuevas impresoras como nosotros las impresoras convencionales, y todo quizás gracias a la nueva Rever.
La impresora 3D FDM Rever es una idea que acaba de lanzarse en Kickstarter, la famosa web de crowdfunding, de la mano de Qubea.
Se trata de una impresora 3D de muy fácil uso, destinada a que un niño la pueda manejar e incluso imprimir sus juguetes. Sí, porque la Rever como filamento de impresión solo usa plástico PLA, no tóxico y permitido para uso alimentario.
Sin complicaciones, todo está pensado para ellos.
La impresora Rever tiene un diseño que se asemeja a los antiguos iMac, muy design y fashion, pero con un interfaz muy sencillo. La carga del filamento -con la bobina en su interior- es muy sencilla, la tapa abatible aisla el interior, y no hay nada «galáctico».
No hay ranuras SD ni puertos USB. La Rever recibe los ficheros y trabaja por WiFi, a través de apps de Android o iOS.
Envías el fichero, cierras la app, y vuelves para cuando la Rever haya acabado.
Además, la Rever funciona diferente: su cabezal de impesión se mueve solamente de izquierda a derecha, mientras que la cama de impresión se mueve hacia adelante y hacia atrás, y de arriba a abajo, con lo que con ambos movimientos se imprime la pieza.
De este modo el cabezal extrusor, caliente y peligroso, se puede mantener guardado y alejado de las manos de los niños cuando éstos van a retirar la pieza impresa.
Su precio de unos 200 euros la hace tremendamente atractiva, aunque su resolución de capa sean 100 micrones, floja, y su volumen de impresión -pequeño- sea de 150 x 150 x 150 mm..
Acércate a la web de los inventores, Qubea, en Kickstarter.
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