Metamateriales 4D que soportan 300 veces su peso

Hace ya muchos años que existen los metales con memoria, que recuperan la forma gracias a la aplicación del calor, pero hoy hablamos de plástico impreso en 3D, metamateriales 4D de impresionantes características.

La impresión 3D está llegando a niveles de ciencia ficción, creando plásticos con memoria, los denominados metamateriales, con comportamientos no vistos en la naturaleza... Y esto es ya una realidad.

En la universidad de Rutgers de New Brunswick han creado unas estructuras plásticas impresas en 3D que son al mismo tiempo, ligeras, deformables, con capacidad para recobrar su estructura original -con memoria- e increíblemente resistentes.

Su estructura en celosía recuerda al infill interno de las piezas impresas con una impresora FDM, algo de lo que ya hablamos hace un tiempo.

Volviendo a lo que nos ocupa, estas piezas pueden ser elementos estructurales de un avión o un dron, por ejemplo, que necesite transformarse o deformarse para una determinada tarea.

¿Cómo se transforman estas estructuras?

Simplemente con calor y presión, por ejemplo. En un interesante vídeo podréis apreciar de qué hablamos.

Los metamateriales 4D impresos en 3D son sorprendentes

Estas estructuras son capaces de soportar 300 veces su peso, deformarse bajo presión, y recuperar de nuevo su forma de manera normal a temperatura ambiente o aplicando una fuente de calor.

Pero hay más porque también se puede alterar su forma incluso de manera drástica, sin que pierdan su resistencia y capacidad de soportar cargas.

Lo sorprendente es que tras haber sufrido una deformación extrema también recuperan su forma original si se les aplica calor. Se pueden transformar, permanecer con una forma determinada y luego devolverlos a su forma original cuando se necesite, solo aplicando calor.

Más sorprendente todavía es que la estructura original cambia sus propiedades cuando se le aplica calor, volviéndose totalmente elástica y absorbiendo la energía cinética de un impacto.

Sin embargo, esta misma estructura a temperatura ambiente es muy rígida y resistente, no deformándose en absoluto bajo un determinado impacto.

Un último detalle es que pueden alterar la fórmula del plástico para variar su temperatura de «trabajo», a la cual transforman sus propiedades o forma.

Ya podéis imaginar lo que se podría diseñar con un metamaterial de estas características… Maravillas inimaginables en ingeniería…

Más información en este link.

Os dejamos con un interesante y espectacular video.