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La pantalla 14K y la innovación han llegado finalmente a Phrozen con una nueva Phrozen Sonic Mighty Revo 14K que promete ser un punto de inflexión en la marca de Hsinschu.
Hacía un tiempo ya que habían lanzado la actualización de la Mighty 8K para convertirla en 12K, un kit de instalación que costaba unos 250 euros, pero hasta ahí habían llegado en cuanto a resolución en la marca de Taiwan.
Para acelerar ventas de su kit decidieron entregar unidades de la Mighty 8K ya convertidas a 12K, para ahorrarle al cliente la tarea de instalación, por lo que Phrozen vendía «directamente» una Mighty 12K. Pero seguía sin ser suficiente tras la llegada de la Elegoo Saturn 12K Ultra y la Anycubic Photon Mono M5s Pro 14K…
Así que finalmente lanzan una 14K, la Phrozen Sonic Mighty Revo 14K, que no solamente tiene una pantalla LCD monocromática de 14K pixels, sino que trae muchas más novedades.
Externamente es totalmente distinta a cualquier otra Phrozen, con nuevo diseño, cuerpo metálico y cubierta abatible en plexiglás transparente naranja. El puerto USB está en el frontal, en la parte izquierda, mientras que el botón de puesta en marcha está en la parte trasera.
En la parte baja central se halla la nueva gran pantalla TFT a color y táctil de control, que ahora tiene un nuevo interfaz, y además tiene conectividad por wifi.
La nueva máscara LCD de 10,1″ -mismo tamaño que la Mighty 8K- es de resolución 14K, lo que unido a un volumen de impresión de 223 x 126 x 235 mm, da una resolución XY de 16,8×24,8 micras, con curiosos pixels rectangulares tan comunes hoy en día.
O sea que no es de mayor tamaño que una Mighty 8K ni su volumen de impresión es mayor, solo tiene mejor resolución, pero por suerte hay más novedades tecnológicas. La primera es que incorpora un calefactor del volumen de impresión, además de un filtro purificador de aire. Primera gran novedad.
La segunda es que ya tiene autonivelado de la plataforma de impresión, así que ya no será más necesario realizar esta engorrosa tarea. Segunda gran novedad.
Y la tercera novedad es que dispone de sensores piezoeléctricos que detectan si la pieza se separa de la base de impresión o si se detectan partículas de resina solidificada flotando en la cubeta. Esto es novedad total en la marca y la segunda firma en incorporarlo tras Anycubic.
Y hay más, ya que incorpora una cámara de monitorización que permite ver la progresión de la impresión a través de wifi y de la app Phrozen Go -que prometen que funciona mejor que en la Mighty 8K- y la cubeta de impresión incorpora lámina nFEP, nada de ACF -que tiene bastantes malas críticas.
Un último gran detalle es que la máscara LCD se cambia muy fácilmente, sin herramientas y sin desmontar nada, una excelente ayuda a la hora de realizar el mantenimiento.
Según declara su actual CEO y cofundador de la firma, Ray Wu, “como la impresión 3D cada vez es más popular, pensamos que que no se trata solamente de conseguir mayor nivel de detalle, algo que salta a la vista, sino de también mejorar lo que no se ve».
Ya está a la venta a un precio de 1.034 euros con dos litros de resina, una cifra elevada pero acorde con las innovaciones que ofrece. La incorporamos a nuestra Guía de Compra de impresoras de resina, no olvides tenerla siempre presente.
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