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La conocida empresa australiana Monocure lanza filamentos plásticos para FDM, toda una novedad y una grata sorpresa.
Sorpresa porque hasta ahora Monocure se había especializado en fabricar resinas fotosensibles para impresoras SLA o DLP.
Así, su gama de productos para el mundo de la impresión 3D se ha visto ampliada con 31 filamentos plásticos para impresoras FDM.
Pero no penséis que los materiales son exóticos o muy variados, ya que todos ellos son de PLA o de PETG.
Los filamentos disponibles hasta el momento basados en PLA son los que contienen madera o metal, los que son conductores de la electricidad, los que son multicolor o los mates.
También tienen filamentos de PLA que cambian de color con la temperatura o los rayos UV e incluso filamentos que brillan en la oscuridad.
Para imprimir el PLA recomiendan una temperatura de hot end de 190-220º, cama de impresión entre 0 y 50º y la velocidad entre 20-50 mm/s o 50-110 mm/s dependiendo del tipo de «relleno» del filamento -hay que consultar cada tipo-.
El PLA conductor de electricidad recomiendan una temperatura de hot end entre 200-230º, una cama de impresión a 100º y una velocidad entre 20-50 mm/s.
En cuanto a los filamentos de PETG disponen de 8 diferentes, en colores transparente, azul, negro, naranja, verde, gris, rojo y blanco.
Para imprimir el PETG recomiendan una temperatura de hot end entre 220-250º, una cama de impresión a 30-50º y una velocidad de 40-80 mm/s.
Todas las bobinas son de filamento de 1,75 mm y de 1 kg -excepto el PLA conductor de la electricidad que es de 500 g-, y tienen unos precios que oscilan entre los 29 dólares australianos y los 75 del PLA conductivo, aunque la gran mayoría está en los 36 dólares.
Aunque estén en Australia, podéis echar un vistazo a su tienda online.
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