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Josef Prusa no podía quedarse estancado en las impresoras FDM, así que aquí tenéis su primera impresora de resina, la SL1.
Los tiempos cambian y si eres fabricante de impresoras FDM debes tener también una impresora de resina en tu catálogo, sea DLP, SLA o DLP-LCD.
Así lo ha entendido Josef Prusa, padre de las populares y afamadas impresoras FDM Original Prusa.
Todos conocemos las Prusa, sobre todo su último lanzamiento, la Original Prusa i3 MK3, de excelente rendimiento y calidad.
Pues bien, la SL1 es una impresora DLP-LCD Open Source que a primera vista promete una elevada calidad.
Ya sabéis que las impresoras DLP-LCD solidifican resina fotosensible gracias a una fuente de luz led y a una pantalla LCD que hace de máscara de los slices.
Volviendo a la SL1 los detalles de calidad saltan a la vista: la cubeta -vat- de aluminio, las robustas guías del cabezal, la calidad de los plásticos…
No es una baratija… Pero ¿de dónde sale esta impresora?
No, tranquilos, no viene del mercado chino sino de la absorción de una empresa checa, y es que Prusa ha comprado la empresa que fabricaba la SL1.
Futur3D es la fabricante de la impresora, ahora ya bajo el paraguas de Prusa.
La SL1 se caracteriza por un interesante mecanismo de impresión para lograr una superficie más suave y menos stress en la pieza.
Su cubeta de resina bascula tras imprimir cada capa -con un motor-, para separar la pieza impresa de la lámina plástica FEP del fondo de la cubeta.
Además de precisión, menos problemas para la pieza y más calidad superficial, la velocidad de impresión es mayor.
Este sistema es parecido al que emplea Kudo3D en su Titan 2 y en su Bean -impresoras DLP-LCD-.
Más detallitos son un sistema de retoma de la impresión Power Panic, extracción de vapores, sensor de nivel de resina y membrana protectora de la electrónica.
Además, la pantalla LCD tiene refrigeración extra, para alargar su vida útil y la plataforma de impresión es de calibrado automático.
La SL1 tiene una mejor resolución de capa de 10 micrones, aunque recomiendan utilizar la opción de 25 micrones, igualmente excelente.
La velocidad de impresión está en torno a los 6 s por capa y la resolución XY es de 47 micrones.
Ello es gracias a que su pantalla LCD tiene 2K de resolución (2.440 x 1450 p).
Por cierto, es compatible con todas las resinas del mercado sensibles a los 405 Nm.
Tiene una pantalla LCD táctil a color de 4,5″, y conectividad por wifi, ethernet y USB y utiliza su su slicer Slic3r PE (por navegador web).
Tiene un precio de 1.599 euros, no es barata, pero promete mucha calidad y facilidad de uso.
También está disponible en kit, para que la montes tú, por 1.299 euros.
Y si compras el paquete de impresora y estación de limpieza, es tuyo por 1.799 euros.
Las puedes comprar ya en su tienda online aunque comenzarán a enviarlas a partir de diciembre.
Además también ofrecen su estación de lavado y curado de piezas, la Original Prusa Curing and Washing Machine (699 euros).
Este accesorio permite lavar las piezas impresas con alcohol isopropil y curarlas con luz UV (405 Nm) de una fuente led. Dos en uno.
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